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Opciones... y gracias
4 participantes
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Opciones... y gracias
Hola. Llegué a este foro anoche buscando respuestas y la verdad dormí tranquila por primera vez en harto tiempo. Así que les escribo primero para agradecerles, y segundo por si alguien tiene una historia similar y quiere hablarlo...
Tengo 32 años y una hija de 12. Me casé con su papá cuando nació, no duramos mucho tiempo juntos y nos separamos. Hoy él está casado, tiene otro hijo, y mi hija disfruta muchísimo de su padre y su hermano.
Yo no tuve la misma suerte. Me dediqué a mi trabajo y a mi carrera, y me fue bien. Entre medio, conocí a un tipo, mucho mayor que yo, con hijos y casado. Y me enamoré. Sabía que no iba a lograr muchas cosas con él, así que cuando hace cuatro años empecé a sentir el ruido de ser mamá, investigué eso de los donantes anónimos. Y estaba en eso, con tiempo para pensarlo, cuando él llegó a proponerme que tuviéramos un hijo. Yo dije que sí, dejé de tomar pastillas, y empezamos la aventura... lo dejamos al azar, tratamos más de un año, tampoco presionamos nada, pero no resultó. El tema tensionó la relación, y me fui dando cuenta de que en realidad él no quería tener un hijo, sino más bien quería que yo no lo dejara por querer tener uno. Nos separamos, y él llegó con la idea de separarse y casarse conmigo... volvimos, pero eso tampoco resultó.
Dejar de tomar pastillas hizo que aparecieran otros problemas. Tengo una endometriosis severa y voy por la segunda operación. Los médicos tratan de hacer lo posible por mantener tu sistema operativo por si quieres tener hijos luego, pero la verdad es que el dolor no se pasa, y es muy inhabilitante. Y es verdad... quiero tener un hijo. Así que volví a la idea del donante anónimo.
La primera vez me hice la valiente y tampoco lo pensé mucho. Pero cuando has pasado por la experiencia de tratar de quedar embarazada, cuando te imaginaste en todas las ovulaciones una oportunidad y esperaste ansiosa tener un atraso, de la mano de alguien que -supuestamente- quería lo mismo que tú... más aun, cuando pensaste que realmente él era LA persona con la que querías tener un hijo... bueno, en esas circunstancias la verdad es que la idea del donante anónimo tiene sabor a derrota. Pero no me estoy poniendo más joven, y estoy cansada, porque entre mi hija y mi trabajo me he gastado mucha energía y la verdad es que pensar en esperar que llegue alguien que de nuevo me haga sentir que es LA persona indicada para terminar teniendo un hijo en diez años más me cansa más. Así que, con sabor a derrota y todo, racionalmente creo que es el momento...
Y me quedé pegada en una idiotez: el apellido. En mi país puedo ponerle el que quiera... pero también cualquiera sin preguntarme puede llegar a cambiarlo (procesos mediante, sé que no es muy fácil, pero el tema es que no requieren de mi permiso). Más allá de esto, la verdad es que el apellido es una historia. Y la mía es una historia que puede sonar egoísta: ¿cómo le explico a los quince que no conozco al papá, que lo saqué de un catálogo, que sí, su hermana tiene papá y él no y sí, yo quería ser madre y por yo querer ser mamá le negué la posibilidad de tener un papá?... Díganme lo que quieran, puedo tener miles de justificaciones, pero ninguna de ellas se va a sentir ni escuchar muy linda en los oídos de un adolescente...
Así que estaba en eso cuando llegué acá... Y leí hartos comentarios y de repente me di cuenta de que hay dos cosas que son reales: que quiero ser mamá, y que estoy dolida. Y no tienen por qué caminar juntas, porque de ellos, una es anterior a la otra. Es posible, y no tengo por qué negarme a ello, que en unos años sí conozca al hombre de mi vida, y él conocerá a una mujer con dos hijos, y tendrá la posibilidad de ponerle su apellido al segundo... Y también es posible que eso no pase nunca, pero que termine teniendo un hijo feliz sin papá y disfrutando de todo el resto de su familia... y entre medio, incluso es posible que conociendo al hombre de mi vida, mi hijo tenga la opción de no querer su apellido... he pensado en todas las posibilidades y ninguna de ellas se cierra con la decisión de tener un hijo ahora. Si mi hijo me odia por no darle un papá, yo de veras traté, y espero que algún día lo entienda... No sé... de todas formas, creo que nadie en verdad puede odiar a sus papás cuando lo quieren...
Creo que estaba ahogada en tener todo listo ahora y la verdad es que no puedo manejar todas las variables. A mi hija la tuve de repente y sin planificación alguna, y está bien, es feliz, no resulté ser tan mala mamá... quizás eso me lleva a tratar de planificar absolutamente todo ahora, pero no necesariamente voy a lograr que las cosas salgan mejor así. Así que gracias, porque de alguna forma, leerlas a ustedes, incluso a las más estresadas con el tema, me hizo sentir en paz.
Un beso a todas y mucho ánimo!
Tengo 32 años y una hija de 12. Me casé con su papá cuando nació, no duramos mucho tiempo juntos y nos separamos. Hoy él está casado, tiene otro hijo, y mi hija disfruta muchísimo de su padre y su hermano.
Yo no tuve la misma suerte. Me dediqué a mi trabajo y a mi carrera, y me fue bien. Entre medio, conocí a un tipo, mucho mayor que yo, con hijos y casado. Y me enamoré. Sabía que no iba a lograr muchas cosas con él, así que cuando hace cuatro años empecé a sentir el ruido de ser mamá, investigué eso de los donantes anónimos. Y estaba en eso, con tiempo para pensarlo, cuando él llegó a proponerme que tuviéramos un hijo. Yo dije que sí, dejé de tomar pastillas, y empezamos la aventura... lo dejamos al azar, tratamos más de un año, tampoco presionamos nada, pero no resultó. El tema tensionó la relación, y me fui dando cuenta de que en realidad él no quería tener un hijo, sino más bien quería que yo no lo dejara por querer tener uno. Nos separamos, y él llegó con la idea de separarse y casarse conmigo... volvimos, pero eso tampoco resultó.
Dejar de tomar pastillas hizo que aparecieran otros problemas. Tengo una endometriosis severa y voy por la segunda operación. Los médicos tratan de hacer lo posible por mantener tu sistema operativo por si quieres tener hijos luego, pero la verdad es que el dolor no se pasa, y es muy inhabilitante. Y es verdad... quiero tener un hijo. Así que volví a la idea del donante anónimo.
La primera vez me hice la valiente y tampoco lo pensé mucho. Pero cuando has pasado por la experiencia de tratar de quedar embarazada, cuando te imaginaste en todas las ovulaciones una oportunidad y esperaste ansiosa tener un atraso, de la mano de alguien que -supuestamente- quería lo mismo que tú... más aun, cuando pensaste que realmente él era LA persona con la que querías tener un hijo... bueno, en esas circunstancias la verdad es que la idea del donante anónimo tiene sabor a derrota. Pero no me estoy poniendo más joven, y estoy cansada, porque entre mi hija y mi trabajo me he gastado mucha energía y la verdad es que pensar en esperar que llegue alguien que de nuevo me haga sentir que es LA persona indicada para terminar teniendo un hijo en diez años más me cansa más. Así que, con sabor a derrota y todo, racionalmente creo que es el momento...
Y me quedé pegada en una idiotez: el apellido. En mi país puedo ponerle el que quiera... pero también cualquiera sin preguntarme puede llegar a cambiarlo (procesos mediante, sé que no es muy fácil, pero el tema es que no requieren de mi permiso). Más allá de esto, la verdad es que el apellido es una historia. Y la mía es una historia que puede sonar egoísta: ¿cómo le explico a los quince que no conozco al papá, que lo saqué de un catálogo, que sí, su hermana tiene papá y él no y sí, yo quería ser madre y por yo querer ser mamá le negué la posibilidad de tener un papá?... Díganme lo que quieran, puedo tener miles de justificaciones, pero ninguna de ellas se va a sentir ni escuchar muy linda en los oídos de un adolescente...
Así que estaba en eso cuando llegué acá... Y leí hartos comentarios y de repente me di cuenta de que hay dos cosas que son reales: que quiero ser mamá, y que estoy dolida. Y no tienen por qué caminar juntas, porque de ellos, una es anterior a la otra. Es posible, y no tengo por qué negarme a ello, que en unos años sí conozca al hombre de mi vida, y él conocerá a una mujer con dos hijos, y tendrá la posibilidad de ponerle su apellido al segundo... Y también es posible que eso no pase nunca, pero que termine teniendo un hijo feliz sin papá y disfrutando de todo el resto de su familia... y entre medio, incluso es posible que conociendo al hombre de mi vida, mi hijo tenga la opción de no querer su apellido... he pensado en todas las posibilidades y ninguna de ellas se cierra con la decisión de tener un hijo ahora. Si mi hijo me odia por no darle un papá, yo de veras traté, y espero que algún día lo entienda... No sé... de todas formas, creo que nadie en verdad puede odiar a sus papás cuando lo quieren...
Creo que estaba ahogada en tener todo listo ahora y la verdad es que no puedo manejar todas las variables. A mi hija la tuve de repente y sin planificación alguna, y está bien, es feliz, no resulté ser tan mala mamá... quizás eso me lleva a tratar de planificar absolutamente todo ahora, pero no necesariamente voy a lograr que las cosas salgan mejor así. Así que gracias, porque de alguna forma, leerlas a ustedes, incluso a las más estresadas con el tema, me hizo sentir en paz.
Un beso a todas y mucho ánimo!
pria002- Junior
- Mensajes : 1
Fecha de inscripción : 08/07/2015
Re: Opciones... y gracias
hola... me identifique contigo en varias cosas. Tomar la decision de ser madre bajo hecho pensando nunca es facil.... y cuando ya piensas como mama evaluando mas el danio que le haras al nino a futuro que el inconveniente que tu tienes que pasar lo hace mas cuesta arriba. Yo tuve miles de dudas, las sigo teniendo y se que desde el momento en que me adentre a esta aventura, mis preocupaciones seran infinitas. Sin embargo, llego un momento en que supe que las preguntas y dudas jamas terminarian y decidi intentarlo porque el tiempo cuenta.
En tu caso, tienes ya la experiencia de tu primera hija y creo que eso te puede animar a seguir.
Hay que soltar un poco y dejar ir. Haz lo que te toca hacer y deja que el universo se encargue de lo demas..
En tu caso, tienes ya la experiencia de tu primera hija y creo que eso te puede animar a seguir.
Hay que soltar un poco y dejar ir. Haz lo que te toca hacer y deja que el universo se encargue de lo demas..
hannagt- Junior
- Mensajes : 14
Fecha de inscripción : 13/03/2015
Re: Opciones... y gracias
Yo jamás he pensado que hago ningún daño a mis hijos porque no tengan padre, ahora ya tienen 6 y 5 años son felices.
Dificilisima- Estrella
- Mensajes : 1844
Fecha de inscripción : 18/08/2010
Re: Opciones... y gracias
hola! hay muchas dudas al empezar, pero si tenes claro lo que queres se van a ir despejando.......... en cuanto a lo que tu hijo pueda recriminarte a los 15. sino sera eso sera otra cosa........ creo que contando la verdad desde un principio......... tu hija tiene un papa porque vos en ese momento estabas en pareja, cuando lo tuviste a el no...... mi hijo tiene 6 años, y si bien el manifestó varias veces sus ganas de tener papa, no lo hace ni desde el reproche ni desde la infelicidad, es un niños feliz, pero si, en su caso, le hubiera gustado tenerlo......... y si luego llega la pareja, sola te daras cuenta de lo que es mejor para tu hijo y para todos....... yo tengo un novio hace ya varios años, y esta claro que el no es el papa de mi hijo, ni en ningun momento se me paso por la cabeza cambiarle el apellido........ aunque pasan tiempo juntos........ suerte!
lolaargentina- Admin
- Mensajes : 1622
Fecha de inscripción : 18/08/2010
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